Los talones agrietados son una dolencia bastante molesta, no sólo porque los síntomas pueden incluir ardor, y en casos avanzados, sangrado de los talones, sino porque cosméticamente se ve bastante mal. Esto suele afligir mucho a los pacientes, especialmente a las mujeres que sufren de este mal.
Las formas para prevenir este mal son muy sencillas, simplemente hay que usar zapatos cerrados, pues las sandalias y otros tipos de zapatos abiertos contribuyen a que los pies se resequen, y usar cremas humectantes a diario. Sin embargo, si ya estamos en el punto en el que los talones ya se han agrietado, es mejor usar remedios caseros.
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| No solo se ven mal, los talones agrietados también son muy molestos |
Baños para pies
En una cacerola grande colocar 2 litros de agua, el jugo y la piel de dos limones, y calienta hasta que hierva. Ahora deja que repose a temperatura ambiente para evitar quemarte. Sumerge los pies por diez minutos, lo más caliente que aguantes. Luego frota los talones con piedra pómez con cuidado de no rasparte muy duro y hacerte daño. A continuación seca bien tus pies y ponte calcetines de algodón.
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| Utiliza la piedra pómez con mucho cuidado |
La acción del agua con limón suavizará las células muertas y tendrá un efecto astringente que evitará que las bacterias se muden en las grietas de tus pies. La piedra pómez es especial para remover células muertas, pues su textura naturalmente favorece esta función.
Cubiertos de parafina
La parafina es muy utilizada en spas alrededor del mundo para tratar las manos resecas y maltratadas, pero también es muy útil para los talones agrietados, pues irá suavizando la piel, regenerando las grietas y aliviando la resequedad, combinada con aceite de coco y aceite de oliva, los talones ganarán su humectación fácilmente.
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| la parafina ayudará a reparar tus talones agrietados |
Simplemente coloca dos tazas y media de parafina en un recipiente, agrega una cucharada de aceite de coco y una cucharada de aceite de oliva. Calienta en baño maría hasta que se ponga líquida la parafina, entonces mezcla con una cuchara para que se integren los aceites. Luego retira del fuego y espera a que se ponga blanca la superficie de la parafina. No metas los pies mientras toda la parafina siga líquida, o te vas a quemar. Deja tus pies en la parafina media hora, luego retira la parafina que se te ha pegado. Comenta y comparte.
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Foto Por Cortesía:esteticaimagen.es
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