Existen muchos problemas derivados de una mala salud digestiva. Esto, sobre todo, se va agravando con la edad, hasta que en los últimos años puede ocasionar úlceras, gastroenteritis, ardores de estómago, etc. Para conseguir que esto nunca se produzca, es necesario que se tomen algunas medidas.
En primer lugar, ingerir alimentos sanos, que ayuden a realizar una buena digestión, como es el caso del plátano o el yogur. El primero se utiliza en casos de ardores, ya que alivia las irritaciones que se puedan formar a la hora de realizar la digestión. El segundo es bueno porque en muchos casos contiene bifidus activo, que consigue paliar los efectos de los cólicos.
Por otra parte, también se recomienda el consumo de muchos líquidos, que siempre ayudan a mantener el estómago en muy buen estado. Por ejemplo, las infusiones, como la manzanilla, el anís estrellado, etc, son sustancias que ayudan muchísimo a conseguir una buena salud digestiva.
Otro de los consejos que siempre se han dado para hacer una buena digestión es el comer despacio, con el tiempo suficiente para poder digerir bien los alimentos. Además, esto provoca que el consumo se atenúe, ya que al comer más despacio, uno se llena antes, y por tanto, tiende a comer menos.
Por último, y no menos importante, conviene evaluar el nivel de estrés que tenemos. En general, cuanto más nerviosos estemos más nos costará hacer la digestión y peor la haremos. Además, tenderemos a comer más rápido, con los problemas que esto acarrea para la salud digestiva.
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