SUPERAR MOMENTOS DIFÍCILES

TRISTEZA 

En ciertas etapas de la vida las personas se ven obligadas a afrontar verdaderos momentos difíciles y angustiosos. El día a día se convierte en un autentico torbellino de situaciones negativas, reflejo de un estado interior inquieto y agitado que convive lamentablemente, dentro de la persona afectada por la angustiosa situación. Grandes sentimientos de confusión y tristeza inundan constantemente la cabeza y el corazón de las personas.

TRISTEZA 

Sentimientos a flor de piel en momentos difíciles

En momentos difíciles se tiende a pensar que no existe una salida inmediata y eficaz que libere la angustia interior. Las personas se sienten constantemente solas, ansiosas y con muy baja autoestima. Numerosos síntomas y sensaciones desorbitantes hacen reconocer que se está atravesando por momentos difíciles. El corazón palpita constantemente con frecuentes punzadas en la zona del pecho, la sensación de la falta de aire en los pulmones y la angustia anida dentro de cada ser que atraviesa por duros momentos y difíciles.

Los pensamientos negativos se agolpan con mayor intensidad haciendo pensar que se perderá el control de los actos. Se tiende a pensar que todo lo que se realiza se hace mal y desordenadamente. El sueño se pierde y las pesadillas hacen acto de presencia en las mentes de las personas afectadas por todo este torbellino de emociones angustiosas. En estos momentos difíciles no se piensa con absoluta claridad y cordura. Las decisiones tomadas en estos momentos difíciles no suelen ser acertadas, por ello, se aconseja a no tomar este tipo de situaciones.

Las personas quedan afectadas por la negatividad latente que tiende a declinar a favor de la oscuridad y desprecio ante la vida. Momentos difíciles que ahogan a las personas haciéndolas desdichadas y rencorosas ante la vida que acontece a diario. Sombras oscuras que atormentan los pensamientos, en ocasiones, aterrorizando a las mismas personas: el miedo.

TRISTEZA - Imagen 

Existe una solución ante estos momentos difíciles

Para superar estos momentos difíciles irremediablemente debe tomarse el control de la situación asfixiante y reflexionar sobre la vida que llevamos. Interiorizar con nuestro interior es la opción más acertada. Preguntar y meditar sobre aquellas acciones que nos hacían sentir bien en el pasado, cuando se estaba sano emocionalmente, hará indiscutiblemente tomar un nuevo concepto sobre lo que realmente nos hace bien a nuestra vida.

Simplificar nuestro día a día hará que superemos estos momentos difíciles y confusos. La vida es sencilla pero la humanidad la hace complicada. El trabajo desorbitante, las tareas del hogar, los hijos y un sin fin de circunstancias más, hacen que dejemos de reflexionar que es lo que realmente se quiere y se desea para el porvenir de cada persona. 

Pasear bajo un precioso día de sol, tomar un simple café con una buena compañía o simplemente correr o jugar con los más pequeños de la casa, debe aportarte parte de esa felicidad anhelada que, desgraciadamente, las personas no se percatan y dan por válida estimándola como una verdadera y válida solución al problema que realmente le afecta.

TRISTEZA

Lo material no nos hace más felices y prósperos

Uno de los errores que nos encontramos es pensar que al tener más cosas materiales, ciertamente se será más feliz, hará que no simplifiquemos la vida y en consecuencia estaremos constantemente bajo ese prisma de desasosiego y tristeza. 

Se debe pensar que los niños con poco son felices. Debemos tomar ejemplo de ellos. ¿Por qué no se intenta hacer lo mismo? Veremos que la vida es más fácil y sencilla. Los momentos difíciles dejarán de existir y únicamente quedará la lección aprendida y la fortaleza interior que dejará, indiscutiblemente, con su paso por nuestras vidas.

                                                                   Copyright © Lidia Maldonado