¿Cuántas veces has quedado con un amigo y en lugar de hablar contigo ha chateado por Whatsapp? ¿Cuántas veces has ido a dar un paseo con tu pareja y no te ha hecho mucho caso porque no para de leer su Twitter? ¿Cuántas veces has preparado un plato de comida y antes de decirte directamente la buena pinta que tiene la han subido a Instagram? Muchas veces la otra persona no es consciente de lo que está haciendo porque vivimos absortos, pero deberíamos ser capaces de ver la realidad. La nomofobiaconlleva graves problemas para la sociedad, puesto que están cambiando su base.
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Adicción
Este acceso libre tiene sus pegas y habría que saber controlarlo, tanto en grandes como pequeños. Pero ¿es que cada vez nos lo ponen más difícil? Mensaje leído ¿por qué no me contesta?Última conexión hace 10 horas ¿qué estará haciendo? Ha comentado en otro muro ¿se cree que no me doy cuenta? Por no mencionar los grupos de WhatsApp, siempre hay alguien que tiene unos minutos libres que casualmente coinciden con los tuyos para hablar sobre cualquier tema banal. Y si llegas tarde... ¡zas! te encuentras con más de 200 mensajes sin leer ¡no puedes despistarte ni un sólo instante! Sino, ¿estás desfasado?
Interacción social
Esta claro que las redes sociales y las aplicaciones de mensajería nos mantienen en contacto con la gente, pero el problema es que a veces no sabemos vivir sin él y esto afecta a las relaciones sociales. Quedar con alguien y que ese alguien esté más pendiente del teléfono que de ti no es, digan lo que digan, quedar con esa persona.
Iniciativas
Por eso, algunos bares han tenido una iniciativa. La idea es sencilla: un grupo de amigos se reúnen para tomar unas cervezas, todos dejan los teléfonos sobre la mesa ¡y el primero que lo coja tiene que pagar la ronda!
E incluso un bar brasileño, Salve Jorge, ha decido ir más allá recortando parte de la base de sus vasos y jarras, de modo que la única forma posible para apoyarlos sobre la mesa consiste en dejar el móvil debajo. Su lema es "el móvil en la mesa, pesa". Es probable que al principio nos sintamos muy tentados de consultarlo, y más cuando suene una alerta de Facebook o WhatsApp, pero después de las primeras risas con nuestros amigos seguro que nos olvidamos de todo y sólo nos centramos en lo importante: ellos.
De todos modos, si las generaciones anteriores ha vivido, y sobrevivido, antes de la era de los smartphones y nunca ha supuesto ningún problema a la hora de quedar a tomar un café, ¿por qué debería serlo ahora?
COPYRIGHT © RUBÉN S. / Foto Por Cortesía: Fotolia
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