La turmalina negra es una de las piedras más significativas en gemoterapia al momento de protegernos de energías negativas. Pero además posee interesantes condiciones para propiciar el desarrollo espiritual y se trata de la gema que reúne una mayor cantidad de propiedades eléctricas.
Turmalina negra
Conocida también como “la piedra de la verdad”, su uso no se circunscribe únicamente a medidas de protección energética. Al mismo tiempo cumple un papel vital en actividades de meditación, concretamente para favorecer la evolución interna, el acceso a niveles superiores de la conciencia o para ampliar la comprensión sobre distintas cuestiones claves en la vida.
Es así que es habitual la combinación de técnicas de meditación con las prácticas tradicionales en gemoterapia, siempre con un protagonismo evidente de la turmalina negra. Se desarrollan sesiones específicas, en las cuales por ejemplo se mantiene una de estas piedras a la altura del corazón por un período de un minuto. Estas prácticas se sustentan en la idea de entender a esta gema como un recurso que aclara el entendimiento con el paso del tiempo.
EL PODER DE LA TURMALINA NEGRA
Las potencialidades de la turmalina negra son verdaderamente muy amplias. Los especialistas en gemoterapia creen por ejemplo que esta piedra puede enriquecer la intuición y hasta conectar la dimensión física, emocional y mental en una persona. Estas dos condiciones son especialmente útiles para tratar patologías como neurosis o depresión.
Por otra parte, en su papel de protectora frente a energías negativas, la gema en cuestión se utiliza para neutralizar cargas nocivas en los ambientes. De esta forma, se aconseja la ubicación de una turmalina negra en los ambientes ocupados durante la mayor parte del día, tanto en espacios familiares como profesionales.
Sin dudas, esta faceta merece un tratamiento especial porque es común que no le demos la importancia que se merece a la cuestión energética en los ambientes. Pero la realidad es que diariamente nos exponemos a espacios que han sido influenciados por pensamientos negativos o por situaciones conflictivas que cargan de una energía densa a los ambientes. La turmalina negra puede ser una excelente aliada para protegernos de estas cuestiones.
LA TURMALINA NEGRA: ASPECTOS FÍSICOS Y CLARIDAD MENTAL
Además de su impacto en el bienestar emocional, esta bella piedra también tendría efectos positivos en el plano físico. En consecuencia, la piel, las articulaciones, los huesos o los ligamentos, entre otras partes del cuerpo, podrían verse beneficiadas por la acción de la turmalina negra al tratar diferentes afecciones o dolencias.
¿Por qué se habla de la turmalina negra como “piedra de la verdad”? Principalmente porque aleja a la persona de las ilusiones o engaños que generan las posesiones materiales o la preponderancia excesiva del ego. Gracias a esto, se obtendría una mayor claridad y se ampliaría la capacidad de comprensión de la realidad. Este acceso más directo a la profundidad de las cosas permitiría que veamos el mundo de una forma más lúcida y sin ese velo que nos entorpece la mirada.
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